Hacer para Deshacer

Después de conocer la nueva terna para escoger al Fiscal General de la Nación, pero antes de ser elegido Eduardo Montealegre, ya se veían venir los inconvenientes, como es de costumbre en este país, donde es costumbre hacer para deshacer, luego corregir, y en el camino invertir tiempo y recursos del erario.

No había sido elegido el Dr. Montealegre y ya se sabía de la gran relación, digamos profesional, que existe entre el mencionado ternado con la famosa Saludcoop donde, según registros, recibió unos 5000  millones en asesorías, y no ha de ser distinto sabiendo su estrecha relación con el presidente de esa entidad, el señor Palacino. Pero ahí no termina la duda. También hay registros que honorarios cancelados por la Presidencia de la República, no solo la de Uribe, sino también la de Santos, por casi 1.500 millones de pesos.

Con este tipo de antecedentes se pone en duda la neutralidad que tendrá la entidad investigadora en casos como el de la misma Saludcoop y en las investigaciones de los ex funcionarios del gobierno anterior, llámese DAS, AIS y demás del mismo calibre.

Mostrará su imparcialidad el Dr. Montealegre, desde su conocimiento jurídico si, cuando tenga que manejar los casos mencionados, se dedica a buscar el fondo del problema, desde el primer día hasta la fecha del fallo o, si desde el principio se declara impedido para llevar a cabo la investigación y se nombra a un funcionario ad-hoc, no sea que dentro de un par de meses aparezca una eminencia en la materia o un estudiante juicioso y demande la elección por un conflicto de intereses o porque su proceder dé muestra de una laxitud acomodada.

Posiblemente pase por la mente de Uribe, así no pase por su twitter, un pensamiento en el que diga: "por fin este gobierno nos dio un respiro", ya que dicen que el Dr. Montealegre es el más uribista de los ternados. También habrán ideas pasando por la mente del presidente Santos, desde la tranquilidad que le dio cuando la elección se hizo con la celeridad necesaria, como la incertidumbre de los casos mencionados.

Fue la Corte la que aplazó la elección de Fiscal General por la animadversión con Uribe, la que aceptó la nueva terna y eligió sin seguir los requisitos a la Dr. Vivian, y la que escogió al Dr. Montealegre. Esperemos no sea esa misma Corte la que recule por razones de fondo o de forma, y tengamos que pasar, de manera ridícula, por otro proceso que no hace sino mostrar tanto la fragilidad de la institucionalidad de la Fiscalía, como la soberbia de los Honorables Magistrados de la Corte del Olimpo.

Gastemos pues más tiempo, en una incertidumbre que parece un periodo de prueba de un cargo como el de la Fiscalía para ver si la elección tiene imperfectos o porque los impedimentos no dejan al Fiscal trabajar, por eso del conflicto de intereses.

Las Dudas de los Requisitos

Hace un año (23/02/11) escribí sobre la tenacidad de la recientemente elegida Fiscal General de la Nación, Viviane Morales, resaltando que se había involucrado en casos de gran calibre, que harían prestar atención a sindicados, interesados, afectados y a los del común. Hoy, tras su renuncia, después de que el Consejo de Estado anulara su elección, se crea una incertidumbre de cuántos casos no habrán sufrido la misma nulidad, pero sin que salgan a la luz, sea por conveniencia o por ignorancia.

La nulidad se dio porque los Magistrados de la Corte Suprema de Justicia, desgastados tras más de un año de interinidad en la Fiscalía y votaciones infructíferas, ambos casos provocados por la animadversión con el ex presidente Uribe, decidieron modificar el mecanismo de votación, desconociendo sin saberlo, unos lineamientos que permitían ciertos cambios, pero también con ciertos requisitos. La Dra. Morales fue elegida por 14 votos, mayoría en el momento, y no por los dieciséis necesarios.

Es grave ese error que, dándole el beneficio de la duda, la Corte hizo con más descuido que mala intención, o lo contrario, una decisión política, más que jurídica. Preocupante es ponerse a pensar cuantas casos ocurren en el ámbito jurídico que pueden estar invalidados desde su nacimiento, pero que nadie sabe, pues si los Honorabilísimos Magistrados de la Flamante Corte Suprema de Justicia, hombres académicos de décadas, quienes supuestamente son los que más saben de leyes, en el sector público, cometen errores de este tamaño, y nadie se dá cuenta, que podemos esperar de otros funcionarios que, con menos experiencia aunque con todo el derecho a equivocarse, pueden tomar decisiones que pueden implicar consecuencias sobre personas y temas.

Cómo sería de detallado el procedimiento a seguir y con tantas condiciones que ni los fervientes uribistas, lease Jose Obdulio, Uribito, Maria del Pilar, entre otros, no habían caído en cuenta del error, que se volvería la en fórmula perfecta para poner el tema, y a Viviane, en la picota pública y salir de ese dolor de cabeza, que según algunos de ellos, estaba creando una persecución.

La Corte va a estudiar la carta de renuncia de Viviane, esperemos que con más prolijidad al analizar y a la hora de dar declaraciones públicas. Esperemos también que, si las decisiones tan trascendentales las toman los Honorables Magistrados, sepan cual es el procedimiento, y también los requisitos para poder cambiarlo, no sea que les demanden la aceptación de la renuncia.

(pd. Felicitaciones a La Luciérnaga por sus 20 años)