miércoles, 19 de septiembre de 2012

Procura


Procura seducirme muy... despacio,

y ya verás todo lo que en el acto te haré...(1)


El procurador hizo lo que tenía que hacer cuando, al seducir a la Corte, logró que ésta se le adelantara a la Presidencia en postularlo para la terna de posibles aspirantes al cargo o, en su caso, su reelección. Fue sagaz, en muchos sentidos. Pide ser reelegido para neutralizar a posibles oponentes de su amada tendencia conservadora, camanduléra y retrógrada, sea un aspirante que desde la otra orilla tenga grandes opciones de llegar a cargos públicos de peso e importancia, o por el gusto, que se le ha vuelto vicio, de sancionar a aquellos que, según él, ponen en peligro la moral de este país, como si no tuviéramos más de un ejemplo para acatar que de eso por acá, poco, empezando por él mismo, ya que varios de los cargos que vendieron a mejor postor dentro de las cortes, lo tienen como comisionista, esperando se vea el agradecimiento por los favores recibidos.

Por otro lado, al ser él el candidato de la Corte y no de la Presidencia, se juega las cartas esperando que quien sea postulado por JuanMa y su combo, sea un comodín, solo para cumplir con los requisitos de completar la terna pero que, de entrada se sabe que no tiene mucha opción de ganar.

Uno de los problemas del Procurador Ordoñez es su radicalismo al tomar decisiones o al dar opiniones. Referente a lo primero, se va lanza en ristre contra personajes altamente conocidos por sus comentarios desmedidos, léase Piedad Córdoba. Sin embargo, la destitución de la ex senadora no se dio tanto por sus frases fuera de tono, sino por insinuaciones de que tenía relación directa con las FARC, pero basándose en lo que luego fueron consideradas pruebas no aptas. Ya quisiera yo que el señor Ordoñez midiera sus actuaciones con el mismo rasero para que él mismo, bañado en su moral, ética y personalidad conservadora, se destituyera a sí mismo, o renunciara al cargo, algo más real y digno, pero que es lo mismo.

Referente a lo segundo, él es el primero que sale a criticar a quienes piensan algo que antes era considerado inmoral, o en contra de la ley, aborto, matrimonio entre homosexuales, no importando lo vanguardista a avanzado que pueda parecer el tema. Han sido varios los casos en que el señor Ordoñez, tuvo la falta de delicadeza de tergiversar los conceptos de la Corte Constitucional, referente a las excepciones en que se puede practicar el aborto, o comentarios relacionados con la pastilla del "día después", o el concepto contrario a la jurisprudencia constitucional, diciendo que el aborto en la entidades públicas podía no ser practicado por objeción de conciencia. Por tal razón, la sentencia T-627 del 10 de Agosto de 2012, le impuso una rectificación.

Ordoñez, firme seguidor de la ley, decidió rectificar los conceptos antes de ganarse una sanción que le complicara el camino a su reelección. Claro que al mismo tiempo, aprovechó su conocimiento para imponer un incidente de nulidad ante la Corte y agrega que "el debate no ha terminado, esta discusión científica y jurídica continuará" 

Esperemos que no sea reelegida una persona que se acomoda a lo jurídico cuando le conviene pero que pase por alto tantos detalles en procesos de gente con la cual tiene una animadversión. Sobretodo personal, porque él que piense lo que quiera, pero desde el Ministerio Público, tiene que estar más acorde con los parámetros que establece la ley y nos los conceptos religiosos, conservadores o retrógrados que pueda tener.

(1) Chichi Peralta - Procura